lunes, 11 de marzo de 2013

Somos fascistas



Debemos recuperar la palabra “fascista” de la boca de nuestros adversarios, de toda la palabrería democrática y antifascista, y hemos de retomar esta palabra como un desafío”.


Pierre Drieu La Rochelle.

11-M

11-M: Ni olvido, ni perdón.

domingo, 10 de marzo de 2013

Palestina, una historia de resistencia

Vivimos en una cleptocracia

“Las clases dominantes no han sido nunca ningunos angelitos. Sin embargo, eran tan sensibles que no mostraban sus intenciones. La decadencia real de la época actual consiste en que quizás se vanaglorian de su propio envilecimiento. Lo que tiene que ver con lacleptocracia. La aberración se ha convertido en programa político. Es incomprensible cuánta gente vota a los partidos con este programa, incluso debiendo contar con que, muy seguramente, no van llegar a la ladronera. Puedo llegar a comprender al ladrón (incluso si soy incapaz de perdonarlo). Estos ingenuos votantes de bandidos no pueden ni comprenderlos”.
Jean Keller - 
Laberinto nº 34 / 2011

“Las clases dominantes no han sido nunca ningunos angelitos. Sin embargo, eran tan sensibles que no mostraban sus intenciones. La decadencia real de la época actual consiste en que quizás se vanaglorian de su propio envilecimiento. Lo que tiene que ver con la cleptocracia. La aberración se ha convertido en programa político. Es incomprensible cuánta gente vota a los partidos con este programa, incluso debiendo contar con que, muy seguramente, no van llegar a la ladronera. Puedo llegar a comprender al ladrón (incluso si soy incapaz de perdonarlo). Estos ingenuos votantes de bandidos no pueden ni comprenderlos”.
Jean Keller - 
Laberinto nº 34 / 2011

viernes, 8 de marzo de 2013

Virtud y valores: No bajar los brazos.

 
La conducta que naturalmente queremos para nosotros y para nuestras hermanas y hermanos (ya que para ellos queremos lo mejor) va en abierta oposición -como ya se ha querido señalar- a lo que el Gobierno de turno les depara, sea cual fuere la tendencia que tenga.
Nosotros buscamos la elevación del espíritu: el ser personas correctas y gentiles, el de salir adelante y triunfar en la vida. Ellos entre otras cosas el clientelismo político, el tráfico de drogas, las zonas liberadas y la inestabilidad a niveles soportables. Es por eso que aquellos hombres y mujeres que todavía hoy tienen una fuerte moralidad son los nuevos peligrosos, de lo cual surgue claramente (aunque suene a frase trillada) que no bajar los brazos ante el influjo de la decadencia es para los que tienen el poder como portar un fusil, y decir cosas distintas a las que dicen ellos como disparar.

Vale aclarar, si es necesario, que el problema de la ausencia de moralismos entre los contemporáneos es un problema del no emparentarse con el puritanismo o el reproche autoritario. Y que de la misma manera en que el paternalismo moral importa una sanción, su ausencia total es hoy un mandato o coerción aún más severa: el de mantener una cierta obscenidad bajo pena de exclusión social.
Esto significa que en virtud de la Nueva ética -llevada a nuestras familias por obra y gracia del Estado, la Prensa, y otros intelectuales bajo el control del dinero internacional - la norma fundamental es la transgresión del tabú, de los valores y de la Tradición, con lo que la cultura popular ha derivado en aquello que en otra época sería tildado de anti-cultura, principalmente en cuanto a la glorificación de lo grotesco, la ‘sexualización’ de todo ocio rozando la pornografía, y la imposición del materialismo como estilo de vida.

En este sentido resulta claro que los desastres y la corrupción del sistema capitalista burgués hace que muchos jóvenes quieran sentir una “rebelión” contra el sistema. Pero esa rebelión nunca dejará de ser meramente ‘política’ mientras que en nuestra vida, en nuestro ocio y manera de actuar nuestro espíritu y consciencia estén libremente impregnados de los anti-valores de aquél sistema.

Así convenido la necesidad indica otra vez el camino, y “no bajar los brazos” se presenta como si fuera una doctrina de profunda rebelión, una rebelión que no debe conducirse contra nuestras familias, ni contra la propia identidad, ni transgrediendo hasta las creencias más profundas como su retorcida intención nos dice, sino a su favor; una doctrina que tiene sus principios elementales en la memoria de los abuelos y los padres e incluso antes; a los hombres y mujeres de hoy a los principios elementales les gusta llamarles valores –aunque a menudo no capten el sentido de sus propias palabras y sean abusadas luego por políticos- : los valores son las palabras que sí encierran un significado honorable.

Fuente: Comunidad & Identidad

Klan - Antinazis

jueves, 7 de marzo de 2013

Reds don't read

Detestamos todo lo monótono y mediocre

 
“Detestamos todo lo que es plácido, monótono y mediocre. Las estrellas novas brillan mil veces más que sus ancianas y monótonas compañeras”.

Boris Vian

martes, 5 de marzo de 2013

Victoria de Pedro Varela frente a la "justicia española"

Hoy el área, ha amanecido con alegría ante la noticia de que el estado español debe de pagar 13.000 euros por la sentencia del Tribunal Constitucional Europeo, al librero Pedro Valera por la vulneración de sus derechos como ciudadano, algo que a priori a todos nos alegra, pues demuestra un atisbo de mínima justicia en este opresivo clima de represión y persecución política, pero caballeros, no nos precipitemos en descorchar nuestras botellas y leamos la letra pequeña, pues parco consuelo nos presta esta noticia:
Resulta que la condena se ha visto motivada única y exclusivamente por un formulismo legal, que es el no habérsele comunicado en el tiempo establecido por la ley, los cargos de los que se le acusaba (algo comprensible, pues estos eran una estupidez), sin embargo, el Tribunal Constitucional de Estrasburgo declara no reconocer vulneración alguna de sus derechos como ciudadano, ni de los derechos constitucionales de libertad de expresión y prensa, porque (esto no lo dice, pero se sobrentiende) Pedro Varela es “nazi” y como tal, carece de tales (al fin y al cabo es malo y se merece todo lo que le pase).
Por nuestra parte, no vamos a celebrar nada hasta que no se reconozca lo obvio, que Don Pedro Varela es un librero que ha sido condenado por el único delito de vender libros tal y como ocurre en las dictaduras. Además, dicha resolución es sintomática del carácter tecnocrático y liberal de la Unión Europea y sus órganos, más interesados en el escrupuloso cumplimiento de la ley escrita que en la justicia con mayúsculas.
Igualmente, tampoco se especifica de dónde van a salir esos 13.000 euros, y ya sólo faltaría que mermaran aún más los fondos estatales de sanidad o educación, de modo que sólo nos resultará aceptable la sentencia, si esa multa proviene única y exclusivamente de los sueldos de los responsables personales del atropello (políticos, jueces, fuerzas del orden, etc.), porque ya la cosa clamaría al cielo si al pueblo nos toca pagar ahora, los desmanes del gobierno.
Dicho esto, no nos resta otra cosa que declarar nuestro apoyo al señor Varela y animarle a que prosiga su lucha en nombre de la justicia y la verdad, pues la cárcel nunca podrá silenciar la voz de aquel que lucha por lo que realmente cree.

Hoy el área, ha amanecido con alegría ante la noticia de que el estado español debe de pagar 13.000 euros por la sentencia del Tribunal Constitucional Europeo, al librero Pedro Valera por la vulneración de sus derechos como ciudadano, algo que a priori a todos nos alegra, pues demuestra un atisbo de mínima justicia en este opresivo clima de represión y persecución política, pero caballeros, no nos precipitemos en descorchar nuestras botellas y leamos la letra pequeña, pues parco consuelo nos presta esta noticia:
Resulta que la condena se ha visto motivada única y exclusivamente por un formulismo legal, que es el no habérsele comunicado en el tiempo establecido por la ley, los cargos de los que se le acusaba (algo comprensible, pues estos eran una estupidez), sin embargo, el Tribunal Constitucional de Estrasburgo declara no reconocer vulneración alguna de sus derechos como ciudadano, ni de los derechos constitucionales de libertad de expresión y prensa, porque (esto no lo dice, pero se sobrentiende) Pedro Varela es “nazi” y como tal, carece de tales (al fin y al cabo es malo y se merece todo lo que le pase).
Por nuestra parte, no vamos a celebrar nada hasta que no se reconozca lo obvio, que Don Pedro Varela es un librero que ha sido condenado por el único delito de vender libros tal y como ocurre en las dictaduras. Además, dicha resolución es sintomática del carácter tecnocrático y liberal de la Unión Europea y sus órganos, más interesados en el escrupuloso cumplimiento de la ley escrita que en la justicia con mayúsculas.
Igualmente, tampoco se especifica de dónde van a salir esos 13.000 euros, y ya sólo faltaría que mermaran aún más los fondos estatales de sanidad o educación, de modo que sólo nos resultará aceptable la sentencia, si esa multa proviene única y exclusivamente de los sueldos de los responsables personales del atropello (políticos, jueces, fuerzas del orden, etc.), porque ya la cosa clamaría al cielo si al pueblo nos toca pagar ahora, los desmanes del gobierno.
Dicho esto, no nos resta otra cosa que declarar nuestro apoyo al señor Varela y animarle a que prosiga su lucha en nombre de la justicia y la verdad, pues la cárcel nunca podrá silenciar la voz de aquel que lucha por lo que realmente cree.

Si un camarada falangista

sábado, 2 de marzo de 2013

Lo más importante en tu vida

Se tú mismo, levántate y lucha!


‎"Al preguntársele cuál era la característica de los seres humanos más común en todas partes, aquel viajero que había visto muchas tierras y pueblos, y visitado muchos continentes, respondió: la inclinación a la pereza. Algunos podrían pensar que hubiera sido más justo y más acertado decir: son temerosos. Se esconden tras costumbres y opiniones. En el fondo todo hombre sabe muy bien que sólo está una vez, en cuanto ejemplar único, sobre la tierra, y que ningún azar, por singular que sea, reunirá nuevamente, en una sola unidad, esa que él mismo es, un material tan asombrosamente diverso. Lo sabe, pero lo esconde, como si se tratara de un remordimiento de conciencia. ¿Por qué? Por temor al prójimo, que exige la convención y en ella se oculta. Pero, ¿qué obliga al único a temer al vecino, a pensar y actuar como lo hace el rebaño y a no sentirse dichoso consigo mismo? El pudor acaso, en los menos; pero en la mayoría se trata de comodidad, indolencia, en una palabra, de aquella inclinación a la pereza de la que hablaba el viajero. Tiene razón: los hombres son más perezosos que cobardes, y lo que más temen son precisamente las molestias que les impondrían una sinceridad y una desnudez incondicionales.[...] El hombre que no quiera pertenecer a la masa únicamente necesita dejar de mostrarse acomodaticio consigo mismo; seguir su propia conciencia que le grita: «¡Sé tú mismo! Tú no eres eso que ahora haces, piensas, deseas»."

Friedrich Nietzsche

viernes, 1 de marzo de 2013

Black Metal Sux

“Lo que es moralmente feo nunca llegará a ser artísticamente bello.”
Ceferino Suárez Bravo.

“Lo que es moralmente feo nunca llegará a ser artísticamente bello.”
Ceferino Suárez Bravo.